Clasicismo en escala actual
Clasicismo en escala actual
17.03.1999
Casa Country N. 42

Clasicismo en escala actual

Tomar lo mejor de la herencia paladiana, adaptándolo a proporciones que hagan posible la calidez, y dotándolo de todo el confort que la familia moderna requiere, es la síntesis de esta residencia poryectada y construída por el arquitecto José Luis Litman y Asociados.

Arquitectura

Suite principal. El gran dormitorio tiene una zona de estar y escritorio.

Detalle del baño, donde el hidromasaje, revestido en el mismo mármol del piso, se ubicó en un bow window, la privacidad está asegurada por doble cortina.

“Diseñamos una casa de estilo clásico pero adaptando ese clasicismo a la actual idea de confort. Antes la arquitectura trabajaba con alturas muy importantes, como por ejemplo el caso de algunos bancos construidos a finales del siglo pasado o principios de éste. Tienen ingresos y halls de 8 metros de altura a los que no hay forma de imprimirles calidez. Con alturas de  4 metros, en cambio, se logra una escala humana y mucho más acogedora a menor costa.

Y si no estamos proyectando un banco, sino una casa, la calidez de sus ambientes interiores es una condición irrenunciable. La peor crítica que podría recibir sobre uno de mis proyectos es que digan que tiene el aspecto de una embajada, una escuela o un ministerio, en lugar de ser claramente un lugar dedicado a albergar a una familia”.

La casa clásica

“Llevamos en el subconciente siglos de arquitectura clásica y no tenemos por qué tirarla”, dice el arquitecto Litman. “En lo personal me gusta, y a muchos de los clientes del estudio también. Estoy convencido de que más que ornamentos, son elementos que el ser humano tiene incorporados a su historia y los necesita. Toda la arquitectura paladiana admite, además la modernización de elementos sin perder por ello su esencia.

En esta villa usamos elementos clásicos y también detalles modernos: por ejemplo, nos animamos a utilizar colores que antes no se usaban. Por eso podemos definir que es una casa clásica en sus partes estructurales, que puede darse el lujo de jugar con los colores y con puestas decorativas excéntricas porque se encuentra dentro de un marco clásico que lo permite”.

Los materiales

Los materiales utilizados son nobles, destacándose el uso de la piedra de mármol con diferentes acabados: “Utilizamos mucho mármol, pero no siempre con el pulido tradicional brillante. Para darle acabados nuevos y muy atractivos, facilitar su posterior mantenimiento, se somete la piedra a distintas técnicas.

En sintonía con estos mármoles, también se colocó madera entarugada en algunos de los locales, y moqueta en las suites. Las carpinterías son importadas, con termopaneles; esto permite adecuada aislación acústica y el mejor aprovechamiento del sistema de climatización instalado, de última generación, silencioso y con humedad ambiental natural.

Uno de los ítems que permitió cumplir con el acotado tiempo de obra –la casa de terminó en sólo diez meses- fue la decisión de colocar molduras prehechas, de instalación inmediata”.

La villa obtuvo el Premio a la Arquitectura Joven en la Bienal de 1994, distinción que Litman considera muy importante porque “por lo general en las bienales se premian proyectos de aquitectura moderna, y nosotros alcanzamos esa distinción con una casa clásica”. Fue además, premiada en exposición y publicada en medios especializados.

El proyecto tiene tres elementos puntuales de valoración: la separación de volúmenes según las funciones que se cumplirán en ellos, el estilo y la forma de vivirlo. Los dos livings de lo que podríamos llamar cuerpo principal, están integrados; a su vez, el living más informal, genera una fuerte relación con el jardín. Se trabajó con pocas galerías, sólo las indispensables, para no restar luz a los ambientes interiores.