La evolución de los desarrollos de lujo
14.03.2017
Revista ARQ

La evolución de los desarrollos de lujo

El arquitecto José Luis Litman cuenta cuáles son las tendencias en los emprendimientos más exclusivos de Argentina y Uruguay y explica el comportamiento de los segmentos más altos.

José Luis Litman es hijo de Mauricio Litman, un desarrollador considerado “pionero” de Punta del Este por uno de sus emprendimientos más famosos: el Cantegril Country Club. De a poco y desde muy joven, José Luis conoció de primera mano el manejo de los grandes desarrollos inmobiliarios y se especializó en el segmento de edificaciones de alta gama.

-¿Cómo cambiaron los desarrollos de lujo en los últimos 40 años?
-La alta gama se hizo cada vez más alta y ésta es una tendencia mundial. En los 80 éramos cuatro o cinco los estudios que hacíamos viviendas Premium porque la clase media alta no necesitaba vivir en un palacio como ahora. Hoy no son cinco los estudios que hacen alta gama, sino 20 ó 30.

-¿Cuáles son las tendencias en los desarrollos actuales?
-Ahora la sofisticación es infinita. El estilo tiende a lo ultramoderno, no te das cuenta en qué parte del planeta estás. El mármol ha quedado superado en valores por materiales sintéticos que alcanzan a valer hasta US$700/m2. En cambio, en los 80 el mejor mármol costaba entre 200 y 300US$/m2.  Las casas eran más simples, sólo un 10% tenía aire acondicionado y eso que hacía el mismo calor. Sucede que pasaron muchas cosas; la globalización nos informó a los argentinos todo lo bueno que hay y eso que todavía en edificios no se ha llegado a los niveles top del mundo porque aquí no se podrían pagar. En Miami. Nueva York y Londres, por ejemplo, hay ventanas de triple vidrio que a su vez incluyen una doble pantalla de vidrio. Los usuarios están como en una cápsula.

-¿El público de alta gama tiene información sobre materiales y tecnología?
-Es variado. Un 30% está muy informado porque el amigo acaba de hacer el mejor edificio o recién llegó del exterior. Algo que mejoró la información del cliente son los hoteles internacionales, porque son la vanguardia de inversión en revestimientos, tecnología, iluminación, calidad de pisos y aberturas. Los hoteles 5 ó 6 estrellas de Nueva York, Miami, Londres y Dubai tienen todo. En la Argentina puedo mencionar al Palacio Duhau como de una alta gama diferencial.

-¿A los segmentos más altos jamás los afectan las crisis económicas?
-Sí, pero normalmente se nota en que se aminoran los ritmos. Si sabemos que un emprendimiento va a durar entre 5 y 10 años prevemos que habrán crisis y en consecuencia proyectamos distintas dimensiones de departamentos. La calidad no se toca para nada, procuramos que la dirección de obra sea cuidadosa e intentamos que el mantenimiento que requieran las unidades sea mínimo.

-¿Notas cambios en los tipos de amenidades?
-En lugares turísticos se sumaron un 30% de salas para reuniones y todo edificio tiene su business center, con escritorios, computadoras y secretaria. Pero además le tenés que dar divertimento al usuario: cine y todos los deportes posibles, desde fútbol, golf, polo, hasta canopy y actividades de playa. Para ser más claro: el mundo exitoso residencial lo proyectamos como si fuese un hotel con servicios como la Crystal Beach de Solanas, que extienden la temporada de vacaciones hasta fines de abril o mayo y que arranque en septiembre. Esto se logra incluyendo elementos como piletas in/out climatizadas, por ejemplo. La idea es que el usuario se sienta en un hotel de alta gama inclusive, que tenga todo sin tener que agarrar el auto.